Te pongo en situación: como personas que somos creamos relaciones de afecto con los más cercanos Nos vinculamos con familiares, amigos y compañeros, compartimos con ellos sus alegrías y también sus problemas.
En ocasiones simpatizamos de más y acabamos creyendo que debemos ocuparnos y preocuparnos de sus problemas con la mejor intención de poder ayudarlos. Sin quererlo encadenamos errores que nos llevan a preocuparnos en exceso por los problemas de los demás.
Para resolver esta situación te propongo dos consejos rápidos que te ayudarán a dejar de preocuparte por los problemas de los demás.
El primero, define tu responsabilidad en la situación problema. Después, adopta un rol útil para que la persona cercana que debe gestionar el problema tenga tu apoyo. En el vídeo te explico el cómo.
No comments yet.