Los problemas con el alcohol no son nada nuevos. Cada año diferentes organizaciones (OMS por ejemplo) realizan estimaciones del consumo de alcohol en todo el mundo. Pero poniéndonos en situación, ya no es tan fácil conocer cuantas personas tienen problemas con el alcohol. Los datos que actualmente existen no están claros, hay algunas estimaciones que cuentan que entre uno y dos millones o un 8% de la población tiene problemas con el alcohol.
Hablo de problemas con el alcohol, cuando un consumo esporádico deja de serlo y se convierte en una adicción. Es más, últimamente los patrones de consumo también han cambiado, y también lo han hecho los problemas relacionados con el consumo de alcohol o la adicción al alcohol.
Empieza a despuntar la Drunkorexia, o (drunkimia) para ser más exactos. Que consiste en darse atracones de alcohol esporádicos entre períodos abstemios.
Haciéndolo simple, una persona tiene problemas con el alcohol cuando no puede controlar cuándo empezar a beber o cuándo dejar de hacerlo.
En España nos excusamos en el “sanbenito” de que en nuestra cultura el consumo de alcohol está muy arraigado. Sí, disfrutamos de vinos excelentes y forman parte de una inmejorable dieta mediterránea, pero con moderación, mucha moderación = controlar cuando y hasta cuando. Excusa que nos sirve a todos para normalizar los problemas de alcohol en nuestra sociedad.
El mayor problema con el alcohol, es la falta de conciencia de que realmente se ha convertido en un problema. En muchas ocasiones cuanto mayor o más grave es el problema con el alcohol, más escasa es la conciencia que tiene la persona de que esto sea un problema.
Además, si a eso le añadimos la gran repercusión que tiene a nivel social, de autoconcepto, de rechazo social, de incompetencia y gran peligro para la salud y los demás si además cogen un coche bebidos.
Los problemas con el alcohol, no solo afectan a la persona que bebe desmesuradamente, sino sobretodo a su entorno, sus familiares, sus parejas, sus hijos, sus compañeros de trabajo, etc…
¿Por lo tanto, quién crees que acude a pedir ayuda?
En la mayoría de situaciones, son los familiares los primeros en pedir ayuda, para solucionar los problemas con el alcohol.
Por eso, me parece importante, que todos tengamos claro algunas pautas efectivas para que esta solicitud de ayuda sea efectiva desde el primer intento.
¿Dónde pedir ayuda?
El primer paso es pedir hora con tu médico de cabecera y exponerle la situación.
El médico de cabecera puede hacer una primera valoración de la situación y estimar que derivaciones pueden ser necesarias en ese momento. Cómo en otras situaciones, si por algún motivo la persona con problemas de alcohol es consciente de este problema, todo será mucho más fácil. Y esto a veces ocurre, después de pasar por alguna situación humillante o tremendamente evidente. Pero no siempre, ni así.
Las terapias más efectivas
La terapia psicológica por supuesto, también y depende del caso y situación es muy recomendable el uso de medicamentos (naltrexona, acamprosato, topiramato, antabus y colme) pero deja que decida el médico cuál debería tomar.
Los procesos de cambio
En todos los procesos de cambio, existen unas etapas de preparación hacia el cambio, como proceso que es, són dinámicas, van cambiando. Los profesionales de la salud las conocemos como las etapas del cambio de Prochaska.
En el proceso de cambio para abandonar una adicción como el alcohol, es muy importante saber reconocer en qué etapa está la persona en problemas, para poder establecer una intervención mucho más efectiva. Aunque a veces requiera únicamente informar de dónde puede pedir ayuda cuando se encuentra en una etapa de pre-contemplación. Es decir, únicamente esta viendo y contemplando si puede tener un problema y si existe una solución para él.
Las etapas son: Precontemplación, Contemplación, Preparación para el Cambio o Determinación, Acción o Cambio, Mantenimiento y Recaída.
Complicaciones al pedir Ayuda
Si has llegado hasta aquí probablemente sea porque no es la primera vez que buscas ayuda para que un familiar solucione sus problemas con el alcohol. Me parece menos probable que seas tú el que está inmerso en estos, si es así: no me hagas ni caso y deja de leer…
En esta situación las posibilidades son infinitas.
Mis recomendaciones:
Nunca provoques la confrontación. Si te molestas al encontrarlo bebido, no sirven para mucho las argumentaciones en esa situación. Probablemente no las recuerde fielmente y muy probablemente lo único que consigas es enfadarte y molestarte mucho más.
Para que no se te olvide ningún detalle que te gustaría retener como muestra, escribe o anota cómo te sientes por algo que hayas hecho o dicho. Además, hoy en día solemos tener el smartphone no muy lejos de la mano. ¿Qué pasaría si lo grabas? Sin ningún ánimo más que de mostrárselo a él mismo en otro momento y que él realmente opine. Ni se te ocurra difundirlo, por favor, a no ser que no pretendas ayudarlo.
Parece que cuando se pasa la borrachera todo vuelve a la normalidad. Con nuestra actitud de discreción y disimulo, lo único que hacemos es otorgarle más poder al problema.
Yo siempre recomiendo lo mismo. Háblalo con la persona como primer implicado, después busca ayuda y compártelo con otros familiares y amigos. El primer paso es dejar de esconderlo.
Como en muchas otras adicciones, las personas con problemas con el alcohol, tienen la sensación de que pueden controlar sin problemas la situación. Muchos pueden decidir cuándo empezar a beber y sólo reservarlo para las ocasiones que se propongan. Pero la inmensa mayoría si comparte el problema de no poder controlar cuándo dejar de beber, y este es el verdadero problema.
Por eso, lo intentan, y lo intentan y se lo proponen y lo vuelven a prometer.
Nunca retires todo el alcohol de su alcance si no lo prescribe un médico durante el tratamiento, depende de la gravedad de la situación (grandes cantidades de alcohol diarias, durante varios años), podrías provocar un delirium tremens, que no es otra que la reacción al síndrome de abstinencia del alcohol, cuyos síntomas pueden ser muy graves, incluso con delirios y alucinaciones.
Olvídate de los sermones, probablemente él ya conoce igual que tú lo malo que es el alcohol. También lo está pasando fatal, aunque lo lleve por dentro y no sea capaz de reconocerlo abiertamente.
¿Por qué ocurre?
Las causas o factores que influyen en los problemas con el alcohol, son muy diversos. A grandes rasgos, en muchas ocasiones cuando un hombre tiene problemas con el alcohol, puede estar utilizando una forma muy poco efectiva para afrontar algunos problemas o ocultando otros problemas psicológicos como la ansiedad y las obsesiones. Cuando una mujer tiene problemas con el alcohol, puede estar ocultando otros problemas relacionados con el estado de ánimo, depresión, distimia, etc.
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